Alberto Fernández almorzó ayer con la cúpula de la Confederación General del Trabajo en la Quinta de Olivos, con quienes analizó medidas para favorecer la reactivación económica pospandemia.
En el encuentro participaron los Secretarios Generales de la CGT, Héctor Daer y Carlos Acuña, los integrantes del consejo directivo, Gerardo Martínez y José Luis Lingeri, el adjunto Andrés Rodríguez y el dirigente de la UOM Antonio Caló. También estuvieron presentes los secretarios de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz y el General de la Presidencia, Julio Vitobello, y Juan Manuel Olmos, el Jefe de Asesores.
Durante las más de tres horas que duró el encuentro se analizó una batería de medidas económicas para la pospandemia y se planteó la necesidad de consolidar el diálogo social. Además, se propusieron las pautas para la eventual creación de un Consejo Económico y Social que deberá contar con el aval del Congreso. Otra preocupación que se volcó sobre la mesa fue los fondos destinados a las obras sociales y los consecuentes aportes de las patronales y de los trabajadores, que se consideran necesarios para fortalecer el sistema de salud.
Asimismo, los dirigentes de la central obrera analizaron junto al Presidente la importancia de fortalecer el diálogo social tripartito y la creación de ámbitos de debate con empresarios y funcionarios estatales para poder lograr la creación de empleo genuino. Conjuntamente, los voceros gremiales debatieron con Fernández la necesidad de que “se implementen de forma urgente los acuerdos políticos ya alcanzados, como los planes de vivienda social que, de forma rápida, generan empleo y reactivan a esa y otras industrias”, según comentaron a la Agencia Télam.