La Presidenta del Senado estableció anoche mediante un decreto que el 1% de la nómina del personal de la Cámara de Senadores debe ser ocupado por personas travestis, transexuales y transgénero que reúnan las condiciones de idoneidad para el cargo.
La medida, siguiendo a lo establecido hace unos días por el Presidente Alberto Fernández, alcanza a todas aquellas personas que hayan o no efectuado la rectificación registral del sexo y el cambio de nombre e imagen, tal como lo establece la Ley de Identidad de Género.
Para garantizar la concreta existencia del cupo, se determina la necesidad de establecer “reservas de puestos de trabajo a ser ocupados exclusivamente por personas travestis, trans, transexuales y transgénero”. Asimismo, en el documento se aclara que esta nueva medida no afectará las condiciones laborales de quienes actualmente se encuentran trabajando en el organismo estatal.
En el decreto se reconoce la situación de vulnerabilidad que atraviesa este colectivo: “Las personas travestis, transexuales y transgénero tienen una expectativa de vida de entre 35 y 40 años aproximadamente, lo cual demuestra la cruel y desigual situación social frente al resto de la sociedad argentina”, apuntan.
La resolución fue confirmada y difundida en las redes sociales por Victoria Donda, titular del Inadi. “Se trata de un espacio más en el que la igualdad empieza a ser la norma. Y por supuesto, de la mano de una de las personas que más ha hecho por la ampliación de derechos en nuestro país”, señaló la funcionaria.