El cese de actividades nació a causa de un conflicto laboral, comenzó hoy a las 6 de la mañana y fue encabezado por el Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA).
Ante la falta de respuesta de las cámaras empresariales areneras, el gremio que dirige Juan Corvalán comenzó hoy una medida de fuerza para exigir una recomposición salarial.
Desde el sindicato señalan que las empresas han cerrado los canales de diálogo y hacen “oídos sordos” a los reclamos de los trabajadores. “No vamos a aceptar un acuerdo a la baja como los empresarios intentan aplicar al igual que hicieron con otros gremios de la actividad”, apuntaron desde SUPA.
A pesar de llevar ya tres meses de la paritaria vencida, las empresas continúan sin responder a las demandas de los trabajadores del sector, razón por la que estos últimos resolvieron llevar adelante hoy un cese total de actividades en la dársena F.
“La situación es similar a lo que se vivió en el Puerto de Buenos Aires, donde tuvimos que ir al plan de lucha para torcer la posición de las empresas y evitar un acuerdo perjudicial para los trabajadores”, añadió el gremio.