Alberto Fernández encabezó el acto en San Pedro, con la presencia de funcionarios, intendentes y dirigentes sindicales. Allí afirmó que “ser soberanos quiere decir no depender de otros”.
La ceremonia por el Día de la Soberanía Nacional en conmemoración a la Batalla de la Vuelta de Obligado se realizó ayer al mediodía en la localidad de San Pedro y fue encabezada por el Primer Mandatario, quien estuvo acompañado por la Primera Dama, Fabiola Yañez; el Gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof; el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el Secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Daniel Filmus y Héctor Daer, Secretario General de la CGT, entre otros.
En el marco de este acto, el Presidente enfatizó sobre la importancia de reivindicar aquella fecha: “Ser soberanos quiere decir no depender de otros y defender la posibilidad de desarrollarnos nosotros mismos como sociedad”.
Asimismo, Alberto Fernández resaltó que la soberanía no se reduce solamente al aspecto territorial, porque “también en el presente la soberanía está directamente ligada al desarrollo, a la posibilidad de que seamos dueños y artífices de nuestro destino”, apuntó, y agregó que “hay que pelear por distintas soberanías, como la cultural, la tecnológica, la científica y la alimenticia”. En este sentido, el Mandatario recordó las palabras del ex Presidente Juan Domingo Perón: “Esa es la lucha que tenemos hoy en día, como dijo Perón, ser capaces y artífices de nuestro propio destino, ser los constructores de nuestro futuro. Eso es ser soberanos en el presente”.
“En aquel entonces las potencias del mundo bregaban con los mismos argumentos que hoy, diciendo que la libertad de comercio debía ser garantizada y el resto del mundo someterse a sus lógicas. Ellos traían sus productos de Europa y nosotros teníamos que franquearles el paso definitivamente en perjuicio de los intereses nuestros”, recordó el Mandatario.
En esa misma sintonía, afirmó que “detrás de la argumentación del libre comercio se esconde un sistema de sometimiento, donde algunos elaboran lo producido y venden lo industrializado”, mientras que el resto parece “condenado a seguir viviendo de la producción primaria”.
“Por delante está pendiente la construcción de la Argentina que merecemos. Está en nuestras manos poder construirla. Los convoco a que una vez por todas, en unidad, construyamos la Argentina que nos merecemos”, concluyó el Presidente.