Así lo afirmó el líder metalúrgico en relación al aumento del precio de los alimentos, al tiempo que aseguró que las organizaciones gremiales tienen “la mejor voluntad” para detener la inflación.
Antonio Caló, Secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), habló sobre el panorama económico actual, se refirió al aumento de precios de los alimentos y declaró: “La CGT y los gremios estamos de acuerdo con lo que había trazado el Gobierno nacional, que era el 29% de inflación y el 29% de los salarios más un 4%, pero en esta situación, como vienen enero, febrero y marzo, se puede desbordar”.
De este modo, el dirigente afirmó que “la inflación es el impuesto más distorsivo de los trabajadores”, al tiempo que agregó: “Ojalá que (la inflación) sea del 29% y que vaya bajando progresivamente”.
Frente a este escenario, Caló ponderó el rol de los sindicatos frente al acuerdo de precios y salarios: “Pusimos la mejor voluntad. Ahora tenemos que ver la voluntad de los empresarios”. En esa línea, añadió: “Nosotros, los gremialistas, siempre vamos a bregar para que baje la inflación”.
“Para controlar este desmadre de precios, el Gobierno tiene que actuar”, aseveró, al plantear la necesidad de la Argentina “algún día” pueda tener “una inflación de un dígito”.
Cabe mencionar que la rama de bebidas y alimentos volvió a aumentar superando el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide el INDEC, con una alza del 3,8%. De este modo, el rubro volvió a superar el índice general de inflación.
Para concluir, el dirigente metalúrgico anticipó que si la inflación supera lo establecido por el Gobierno nacional, “los sindicatos se van a tener que sentar nuevamente” para debatir al respecto.