Así lo afirmó el líder de la UOCRA durante en la Conferencia de la OIT, al plantear la necesidad de discutir un nuevo contrato social que garantice el desarrollo económico.
En el marco de la 109° Conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Gerardo Martínez, Secretario de Relaciones Internacionales, reivindicó la creación del Consejo Económico y Social en Argentina, al tiempo que manifestó la necesidad de poner en marcha “un nuevo modelo y pacto social”.
“La pandemia incrementó a escala mundial las desigualdades que el movimiento sindical viene manifestando hace décadas. La OIT debe repotenciar su rol histórico para liberar una gobernanza mundial ante los daños estructurales provocados por esta crisis”, señaló
Asimismo, el dirigente sostuvo que la nueva realidad mundial provoca un impacto económico y serios daños estructurales, por lo que explicó que hay que promover una iniciativa de reconstrucción al estilo “Plan Marshall”, con el objetivo de permitir la recuperación de las naciones endeudadas.
“Preocupa la inflación, que es el impuesto a la pobreza. Los trabajadores contribuyen con responsabilidad a generar las condiciones de estabilidad que requiere el país. Aliviar esa situación es responsabilidad colectiva para generar una gobernanza inclusiva y con desarrollo. La creación del Consejo Económico y Social en la Argentina es una iniciativa que era esperada y es aplaudida por la sociedad”, detalló.
En tanto, el líder cegetista planteó que los referentes sindicales deben discutir un nuevo contrato social que garantice el desarrollo económico con justicia social “donde nadie quede atrás”, al tiempo que hizo hincapié en que “el diálogo económico-social como política de Estado es una llave maestra para resolver los problemas“.
Por otro lado, Martínez se refirió a la administración del ex presidente Mauricio Macri y declaró que quienes gobernaban en 2018 la Argentina desde “un populismo de derecha, contrajeron un empréstito de 46 mil millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo que profundizó la caída económica y productiva y provocó más pobreza y desempleo“.
“La situación económica y político-social de Latinoamérica era ya muy compleja de forma previa a la pandemia. La desigualdad que la caracteriza, con más informalidad, precariedad laboral, desempleo, pobreza y fragilidad de los sistemas de protección social se profundizaron con la irrupción de la Covid-19. Es necesario que el mundo entienda la necesidad de una nueva arquitectura financiera global para auxiliar a los países en desarrollo“, concluyó el máximo referente de la UOCRA.