El Senado convirtió en ley el cupo laboral travesti trans, iniciativa que propone destinar un 1% de las vacantes de la administración pública a personas travestis o trans o transgénero.
Con 55 votos a favor, uno en contra y seis abstenciones, el Senado de la Nación convirtió en ley la iniciativa que propone la inclusión laboral para la población trans, travesti y transgénero, a quienes, a partir de ahora, se les destinará un 1% de las vacantes de la administración pública.
La iniciativa establece que el Estado deberá contratar al menos el 1 por ciento de la dotación de la administración pública, en todas las modalidades de contratación regular vigentes, a personas travestis, trans y transgénero.
En su artículo 5, la ley establece que el Estado nacional, comprendiendo los tres poderes que lo integran, los Ministerios Públicos, los organismos descentralizados o autárquicos, los entes públicos no estatales, las empresas y sociedades del Estado, debe ocupar en una proporción no inferior al 1% la totalidad de su personal con personas travestis, transexuales y transgenero, en todas las modalidades de contratación regular vigentes. A los fines de garantizar el cumplimiento del cupo previsto, los organismos públicos deben establecer reservas de puestos de trabajo a ser ocupados exclusivamente por personas travestis, transexuales o transgénero.
Asimismo, el proyecto fue apoyado por el Frente de Todos y sus aliados, en tanto que el bloque de Juntos por el Cambio votó dividido: el cordobés Ernesto Martínez lo hizo por la negativa, mientras que Roberto Basualdo (San Juan), Julio Cobos (Mendoza), Silvia Elías de Pérez (Tucumán), Laura Rodríguez Machado (Córdoba), Humberto Schiavoni (Misiones) y María Belén Tapia (Santa Cruz) se abstuvieron.
La encargada de abrir el debate fue Norma Durango, presidenta de la Banca de la Mujer, quien sostuvo que la ley “busca establecer medidas de acción positiva orientadas a lograr la efectiva inclusión laboral para una igualdad real de oportunidades en todo el territorio nacional“,al tiempo que agregó que “después de tantos años nuestro país tendrá una ley que beneficia al colectivo de gays, lesbianas, travestis, trans y otras identidades de género”.
“Esta ley viene a compensar tanto dolor y tanto desamparo sufrido durante décadas y tantas vidas truncas, los senadores tienen hoy la oportunidad de revertir una realidad de discriminación y violencia que somete a las personas travestis, trans y transgéneros“, apuntó.
En la misma línea, Luis Naidenoff, jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, aseguró que “este paso que estamos dando como Estado para establecer un piso de dignidad para ingresar al sistema formal del trabajo, es un piso de esperanza”, y añadió que “es un desafío cultural y el puntapié inicial lo debe dar el Estado”.
“Cuando se trata de resolver desigualdades, hay que tener una mirada integral. Es muy difícil encontrar respuestas abarcativas para los problemas del conjunto. Pero Argentina en los últimos años, por la madurez de su dirigencia, hizo del reconocimiento de derechos, un Estado que estuvo a la vanguardia”, sentenció.