El objetivo es que las personas logren una mejor conciliación de la vida laboral y familiar, y que suba la tasa de empleo para personas que tienen entre 20 y 64.
El primer ministro de Bélgica, Alexander de Croo y los tres vice primeros ministros, anunciaron que se llevará adelante una reforma laboral que tiene como uno de sus principales puntos la reducción a cuatro días de la semana de trabajo. Es sin una disminución en la carga horaria ni del salario.
Explicaron que el objetivo es que las personas logren una mejor conciliación de la vida laboral y familiar. Además que la tasa de empleo para personas que tienen entre 20 y 64 años suba del 71,4 por ciento al 80 por ciento en 2030.
Según explicaron, el propio trabajador podrá solicitar trabajar menos horas durante una semana y compensarlo la siguiente.
“El empleador deberá justificar la negativa”, indicó Pierre-Yves Dermagne, uno de los tres vice primeros ministros del Ejecutivo belga, ministro de Economía y Trabajo y miembro del Partido Socialista. Si hay un acuerdo, tendrá una vigencia de seis meses.
También está previsto que se discuta las condiciones laborales y determinar si hay o no una relación de dependencia con la empresa.
“Por primera vez en nuestro país, vamos a presentar criterios claros para complementar la ley sobre la naturaleza de las relaciones laborales. Para poder determinar fácilmente si un trabajador de plataforma lo hace por cuenta ajena o es autónomo”, sostuvo Dermagne
Asimismo, desde la coalición de Gobierno se comprometieron a que la reforma laboral incluya un derecho a la desconexión digital de los trabajadores y fortalecer la capacitación laboral.