Denuncian al gremio de Luz y Fuerza por ocultar cuerpo de Marita Verón y usarlo para extorsiones sindicales

Susana Trimarco revela impactante pista en la búsqueda de justicia para su hija desaparecida.

En un giro impactante en el caso de la desaparición de Marita Verón, Susana Trimarco, madre de la joven desaparecida hace 21 años en Tucumán, ha denunciado al sindicato de Luz y Fuerza y otras entidades gremiales de la provincia por su presunta participación en el ocultamiento del cuerpo de su hija. La Justicia Federal ha abierto una investigación sobre la existencia de una carpeta que contendría fotografías del cuerpo de Marita, que se habría mantenido en una clínica sindical. Estas pruebas habrían sido utilizadas para extorsionar en disputas sindicales.

La nueva pista judicial ha sacudido el poder sindical en Tucumán y ha generado conmoción en todo el país. Según Trimarco, la carpeta con las fotos del cuerpo de Marita habría sido confirmada por diez personas que se presentaron en la Fundación María de los Ángeles, una organización que ella misma fundó para luchar contra la trata de personas.

Trimarco afirmó que el sindicato de Luz y Fuerza y otros gremios más pequeños estaban involucrados en esta trama. “Confirmo que Luz y Fuerza es uno de los gremios. Lo confirmo yo como mamá, yo no le tengo miedo ni al diablo“, enfatizó. Las acusaciones también involucran a personas descritas como “mafiosas” en el mundo sindical.

La investigación se centra en una clínica privada llamada Luz Médica, donde se presume que el cuerpo de Marita habría estado antes de ser trasladado a otros lugares no identificados. Uno de los abogados de Trimarco, José D’Antona, explicó que la carpeta podría haber sido utilizada para extorsionar en medio de conflictos gremiales. “Sería uno de los lugares donde habría estado el cuerpo de Marita, hay también otros lugares, que no son clínicas, ni hospitales, donde también podría haber estado antes de terminar ahí“, detalló.

Carlos Garmendia, otro abogado que representa a Trimarco, señaló que recientemente se recibió información sobre la carpeta en la Fundación María de los Ángeles. Según Garmendia, “en determinadas circunstancias de un conflicto gremial se manifestaba que existía una carpeta con documentación y fotografías que acreditaba que Marita estaba muerta, que estaba siendo usada para extorsionar en cuestiones gremiales“.

La denuncia de Susana Trimarco y la apertura de esta nueva línea de investigación podrían tener implicaciones profundas en el sistema sindical de la provincia y podrían finalmente arrojar luz sobre el destino de Marita Verón, mientras la Justicia continúa trabajando en esclarecer esta compleja trama de hechos.